Cuando un viajero hace un viaje por Camerún tiene presente que es un país con un gran nivel de pobreza y que presenta un desnivel entre una zona donde tiene infraestructuras bastante interesante en cuanto a hoteles y demás, mientras que hay muchas otras zonas rurales que están sumidas en la pobreza más absoluta. Esta es la realidad de Camerún muchos otros países y es una cruda realidad cuando el viajero se topa con ella, porque no resulta agradable poder ver a tantas personas que viven en casas muy humildes y con muy poco que comer a su alrededor.
Cuando el viajero va por las carreteras de Camerún se va dando cuenta de esta realidad, porque a los mismos lados de una carretera cualquiera se puede ver a cameruneses viviendo e intentando subsistir. No todo el mundo está preparado para poder vivir de cerca esta realidad a la que se enfrentan los habitantes de Camerún cada día, porque todos los días es una lucha constante por la supervivencia, por poder encontrar algo de comida y ciertamente es una situación a la que no estamos acostumbrados, porque por suerte tenemos para comer a diario.
En Camerún es uno de esos lugares donde nos damos cuenta lo afortunados que somos, porque tenemos un techo donde vivir, comida cada día y a pesar de la crisis actual, se puede vivir dignamente. Cuando pensamos en los problemas de estas personas, los nuestros se quedan pequeños y casi diminutos. Una cosa es tener dinero para comer alimentos básicos y otra es no tener casi alimentos ni agua potable, que es una realidad mucho más dura y es la que viven muchas personas de Camerún.